Tratamos de compensar todo eso de alguna manera. Hacemos más cosas en casa que afuera. Miramos el balcón o el jardín por la ventana. Las casas tienen más olor a comida casera, o por lo menos a comida más calórica aunque sea de delivery. Vemos más pelis, leemos más libros, cosemos, tejemos...Nuestra ropa de abrigo anda paseando por la casa.
No me volví loca, no voy a hablar de ropa, pero es un buen ejemplo. Si es invierno usamos telas más abrigadas, más pesadas, en indumentaria los colores suelen ser diferentes que en verano, más oscuros, apagados, medio depre...Mientras que en verano todo revive, telas más etereas, colores más fuertes. ¿Por qué no hacemos lo mismo en casa? ¿Por qué nuestra casa debería quedar igual que en verano? Y lo mismo al revés... Tremendo las mantas de lana en el living en verano, me dan calor de verlas!
Definitivamente llegó el invierno: Salen las mantas. Los almohadones de telas más pesadas o abrigadas, las alfombras peludas, colgamos tulmas, pompones, borlas de lanas de colores. La manta granny square, o sea, la manta de cuadros de colores de la abuela.
En algunos casos hasta podríamos cambiar cortinas, chan!... Es más extremo pero es una opción, cortinas de lino por unas de pana, co-pa-do! Por el momento no aplica en mi casa, pero me encantaría.
La idea es que mantengamos los colores y el estilo para que sólo cambiando algunos detalles podamos adecuar la decoración al clima. En decoración los colores pueden acompañarnos todo el año. Lo que nos dice si una prenda o un accesorio de decoración es de una estación u otra es más que nada el material, el tipo de tela, la textura. Hay telas de invierno en colores vibrantes o en colores claros que quedan bárbaro. En las casas de telas hay panas, por ejemplo, de muchos colores y también hay telas teñidas artesanalmente que están buenísimas.
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| Almohadones peluditos, objetos del Norte Argentino, mantas de lana de oveja, de llama, alpaca. |
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| Pieles sintéticas, lanas con textura, chenille, pana, terciopelo, polar, y mas... |
No es tan complicado pasar de una estación a otra. Hay objetos y complementos para elegir que pueden ayudar a dar un ambiente más cálido sin gastar una fortuna.
Un mismo sillón puede cambiar según lo que le pongamos encima. Texturas, colores, todo suma.
No hace falta comprar almohadones nuevos, con comprar sólo las fundas solucionamos el problema y encima no necesitamos tanto espacio para guardar los que no usamos.
Algunos ejemplos de tranformación:
EJEMPLO UNO
CALOR | Almohadón de algodón con estampado de pajaritos y unas luces de color enredadas en la lámpara de pie. Ensalada y limonada con menta y gengibre.
FRÍO | Almohadón de pana turquesa, alfombra peluda de lana, mantas de distintos estampados y colores. Material de lectura y algo calentito para tomar. (la taza de Nap Queen es mortal!)
EJEMPLO DOS
CALOR | Almohadón de algodón de estampados de hojas u otros motivos que pueden tener que ver con la naturaleza, flores, pajaritos, frutas, etc. Acompaña bien uno con texto, una frase o sólo letras. Los materiales: algodón, lino, telas livianas en general.
FRÍO | Almohadones de pana, uno mantiene el color y uno de destaque en color fuerte pero tela pesada. Una manta de lana y pochoclos para la peli.
EJEMPLO TRES
CALOR | Almohadónes de algodón estampado, rayas en azul y blanco siempre da verano. Uno chico que acompaña con estampado geométrico en color mint.
FRÍO | Almohadones de pana, uno oscuro y otro manteniendo el color mint pero de estilo más invernal. La manta no puede faltar.
A seguir pasando el invierno.
Nos vemos pronto!
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