Arquitectónicamente me encantó el edificio, vintage, antiguón, tuneado, mucha onda! Los números de los niveles pintados con stencil en el piso de madera, el ascensor, la escalera es increíble, protagonista sin dudas del lugar... las paredes escritas muy buenas, se lee mejor en foto que en vivo pero sin duda es genial. En la entrada el manifiesto del lugar... lo transcribo, abajo va la foto.
Viajar liviano. Transitar intenso,
y de cada lugar guardar algo.
Vivir a orillas del mundo en un
territorio, una huella, una marca
que todo sea necesario, que nada
sea vacío y cuando tengas un lugar
darle espacio al alma y a aquello
que te recuerde que somos habitantes
de un espacio singular, el nuestro.
Sean bienvenidos a Landmark.
La escalera, cuando vayas me vas a entender!
Hay de todo, de todas las escalas, desde detalles mínimos hasta súper muebles o juegos de living. Estilos fusionados con un justo equilibrio: ecléctico, con onda, vintage pero no del todo, objetos de deseo, inalcanzable pero no tanto, un lugar que enamora. Hay de todo, me hubiera llevado un container, pero como estaba en modo GIRO ARENALES, fui solo como espectadora. Volví con unas ganas locas de volver y llevarme todo, bueno no tanto, pero casi!
Abajo algunas fotos: iluminación, muebles, vajilla, artículos de Bazar. Cuando llegué al cuarto piso me terminé de convencer que estaba en otra parte del mapa. Un flash! una fiesta!
La página de internet está en construcción, podés entrar pinchado acá. Seguramente dentro de poco va a estar activa. Mientras podés pasar a visitar su página de Facebook por acá.
Yo voy a volver, no te pierdas este lugar porque es-lo-más!!!
Nos vemos pronto!
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